
Matzlok fue reducido a las 5.30 de la madrugada por varios guardaespaldas que custodiaban la mansión de diez dormitorios que la artista posee en un lujoso barrio del centro de la capital inglesa. El individuo llevaba consigo varias de las pertenencias de la cantante.
A pesar de tener un numeroso equipo de seguridad, así como cámaras, el intruso, de nacionalidad polaca, pudo entrar en la residencia destrozando una ventana lateral.
Un policía comentó sobre el incidente: «Algo terrible ha ocurrido aquí. La seguridad alrededor de la estrella de pop más famosa debería ser inexpugnable».
En el momento del incidente, Madonna se encontraba en Bay City, Michigan, despidiendo a su difunta abuela, de 99 años, quien ayudó a criar a la artista y a sus cinco hermanos después de que su madre muriera de cáncer de pecho cuando Madonna tenía cinco años.